La última semana - Ingo

Durante esta semana, completé el inventario de la empresa y luego se me permitió trabajar en una hoja de Excel durante el resto de la semana. Aparte de eso, no hubo nada realmente emocionante en el mundo laboral, salvo una exitosa graduación en mi empresa, a la que sólo puedo desear lo mejor para el futuro, ya que los empleados fueron siempre extremadamente amables y el ambiente de trabajo fue siempre muy agradable.

En mi vida privada, en realidad no ha pasado mucho esta semana hasta el viernes, sólo estaba deseando volver a estar en casa. El viernes por la noche, sin embargo, mis compañeros de piso me hicieron regalos de cumpleaños, ya que el 2 de agosto es mi cumpleaños y se suponía que debía dejar el piso a las 4:40 de la mañana del sábado, ya que mi vuelo de vuelta salía a las 7:10. Sin embargo, lo que ocurrió en realidad fue que tuve que dejar el piso a las 7:30 de la mañana del sábado. Pero lo que realmente ocurrió es que me dormí durante todo el vuelo y me desperté a las 06:40 porque probablemente desconecté el despertador en mi profundo sueño. De este modo, pude reservar un nuevo vuelo de vuelta, que salió a las 18:10 del mismo día y llegó a casa a la 1:40 del día siguiente. Por cierto, este exceso de sueño me costó unos 200 euros. Así que una última, exitosa y costosa aventura por mi parte en Barcelona.